¿Cómo preparar los pies para el senderismo de alta montaña?
Con la bajada de temperaturas y la llegada del otoño, vuelven los amantes del senderismo de alta montaña. Para disfrutar plenamente de esta actividad, es necesario prestar atención a los pies, lo que evitará lesiones. Caminar es una de las actividades físicas más complejas, pero también la que aporta más beneficios y resulta más natural para el ser humano.
Antes de realizar cualquier ruta, lo primero que debe hacerse es adquirir información sobre el itinerario que se va a seguir: qué ruta va a realizarse, cómo estará el tiempo durante ese recorrido y el riesgo de avalanchas que exista. El clima de montaña es muy cambiante, por ello en invierno hay que extremar las precauciones. Antes de salir hay que estar preparado. Por ese motivo, lo mejor es acudir a un podólogo como los que ofrece el centro de Podología Elena García en Granada. Estos profesionales pueden tratar las lesiones que se padezcan o realizar alguna revisión o estudio para aplicar plantillas personalizadas si fuera necesario.
Sería un poco irresponsable lanzarse a la montaña sin tener una buena salud de pies. Cualquier variable externa podría suponer un grave problema a lo largo del desarrollo de la actividad.
¿Cómo preparar los pies para el senderismo de alta montaña?
Comenzaremos analizando de dentro hacia fuera, explicando poco a poco lo que es necesario para tener una buena salud en los pies, tobillos, rodillas y caderas.
Piel delicada
Si se tiene la piel delicada, hay productos que ayudan a fortalecerla y así prevenir ampollas. Estas lociones deben aplicarse unos días antes de comenzar la ruta. Si no se tiene constancia de ninguna crema, puedes consultarnos y nosotros te recomendaremos la que mejor se adapte a tus necesidades y circunstancias.
Uñas cortadas
Las uñas son un punto clave: hay que mantenerlas cortadas para evitar lesiones o infecciones. En la montaña el terreno es muy irregular y es sencillo que, con el roce del zapato o por un golpe, pueda producirse una lesión que estropee todo el paseo y que, además, genere un mal mayor por el cual el usuario se encuentre alejado de la montaña.
Plantillas
Acudir a un podólogo para realizar un estudio de la pisada antes de comenzar cualquier actividad es imprescindible. Si es necesario llevar plantilla, también deberá usarse con las botas de montañas. El senderismo de alta montaña es complejo, largo y duro. La parte que más vas a trabajar son los pies, por ello es necesario que estén lo más cómodos y seguros posible.
Hay que descartar la ortesis de silicona, pues no funciona del todo bien. Durante las rutas largas, los desniveles que hay en el terreno y la fricción que realiza el pie provocan que la ortesis se mueva de la zona y acabe en otro lugar del pie, lo que puede resultar muy incómodo. Lo mejor es utilizar esparadrapos para realinear y proteger la zona de rozaduras.
Equipación
La vestimenta de los pies debe ser la apropiada: los calcetines tienen que ser de calidad, no todos resultan adecuados. De nada sirve llevarlos dobles, pues tras muchas horas andando pueden moverse y formar arrugas que producirán rozaduras. El mejor material es el Primaloft, ya que mantiene el pie seco y caliente. El algodón y la lana, aunque son naturales, no favorecen en esta ocasión: retienen mucha humedad del sudor, lo que podría generar ampollas.
Una vez terminada la ruta, lo mejor es desechar toda la ropa para lavar y darse un baño que permita reactivar la circulación y restaurar los tejidos, sobre todo si el agua es más bien fría en el último enjuagado
¿Qué botas comprar?
Para evitar daños, fracturas, rozaduras o caídas, lo más importante es tener las botas de senderismo de alta montaña adecuadas. Para ello, es necesario acudir a una tienda especializada en senderismo. En ellas, el personal debería ser capaz de resolver todas las dudas que se tengan y poder así adquirir aquellos zapatos que se necesitan.
Lo más importante es conseguir unas botas que estén bien ajustadas al tobillo, con una suela adecuada que dé estabilidad también a las rodillas. Si tienes dudas, puedes traernos tu calzado al centro de Podología Elena García en Granada. Aquí te asesoraremos para que puedas hacer la ruta de la forma más segura posible.