La importancia de las normas de higiene en podología
Cumplir con las normas de higiene es fundamental en cualquier negocio de cara al público, pero aún más cuando se trata de una consulta medicalizada. Por una clínica pasan decenas de pacientes a lo largo de una semana preocupados por el bienestar de sus pies. Por ello, los podólogos deberán atender sus afecciones y tratarlas con los diferentes materiales e instrumental que tengan en sus consultas.
Es importante que seamos un referente de profesionalidad y seguridad ante nuestros pacientes. Esto hará que tengan una mayor confianza en nosotros y confíen en los tratamientos que les aplicaremos. Para ello a continuación detallaremos una serie de puntos que deben cumplirse.
Normas de higiene en podología
Las normas de bioseguridad e higiene fundamentales que deben cumplir las clínicas como las de Podología Elena García en Granada son las siguientes:
Materiales protectores desechables
El material que se utiliza como protector, ya sean, paños y guantes, deben ser desechables. De esta forma garantizamos al paciente el uso exclusivo durante su tratamiento.
Contenedores de residuo
Es necesario emplear contenedores de residuos especiales. Es relevante separar el papel, cartón, plástico o residuos orgánicos cuando nos vayamos a deshacer de estos materiales. Existen unos cubos sanitarios especiales para hacer frente a los residuos cortantes y punzantes utilizados en práctica sanitaria. Estos cuentan con un sistema de recogida periódico.
Ropa y calzado adecuados
Los uniformes específicos que existen para el personal de la salud se encuentran ideados para conservar la seguridad e higiene del entorno. Estos están fabricados con textiles repelentes de fluidos, lo que los hace fáciles de lavar.
El calzado también necesita cumplir una serie de requisitos. Debe ser transpirable, antideslizante, cómodo y que no absorba líquidos sospechosos del entorno.
Desinfección del material y la estancia
El material utilizado para las intervenciones que no es desechable, requiere ser desinfectado tras cada paciente. Las piezas tienen un protocolo y material específico para que sea desinfectado y debe realizarse de manera meticulosa.
Este material pasará por el autoclave, con sus controles químicos y biológicos que garantizan la esterilización de dicho instrumental.
Repasar la desinfección antes de cada visita
Antes de cada paciente el profesional deberá asearse, lavarse las manos, cambiarse de guantes. También es primordial cubrir con material desechable la camilla o las sillas que vayan a utilizarse.
Ventila e ilumina la estancia
En ocasiones se están tratando dolencias víricas y bacterianas con productos químicos. Por eso es necesario ventilar la zona para que no se concentren los olores en el ambiente.
De igual manera una buena iluminación nos hará trabajar de forma más cómoda, permitiéndonos ser más detallistas en nuestra labor.
Certificado de calidad al día.
En la actualidad cumplir con los certificados de salud y calidad en los negocios es algo imprescindible e incluso aún más en las clínicas. Existen leyes y normativas que obligan cumplir con una serie de estándares de seguridad.
Los inspectores pasan de manera regular por estos establecimientos y realizan estudios para averiguar si todo cumple con la normativa vigente.