¿Cómo afecta el calor a los pies?
El calor afecta de forma directa a la salud de nuestros pies. Las altas temperaturas que tenemos en verano pueden producir algunos problemas. Los inconvenientes vienen dados por diferentes factores, como el calzado o la exposición de los pies al exterior, y por ello acuden muchas personas a consulta con diferentes afecciones.
¿Cómo afecta el calor a los pies?
A continuación daremos una serie de motivos por los cuales el calor afecta de manera negativa a los pies.
Hiperhidrosis
La sudoración excesiva es un signo que aparece en altas temperaturas debido al calor o al mal uso de determinados zapatos. Esto aumenta las posibilidades de desarrollar alguna infección o de que aparezcan hongos tanto en la piel como en las uñas.
Cuando se produce una transpiración excesiva, se liberan líquidos ricos en sales minerales a través de las glándulas. El fin de esto es que el cuerpo consiga regular su temperatura debido a los grados de más que hay en el ambiente. Con ello se consigue refrescar el cuerpo y mantenerlo a una temperatura por debajo de los 37 grados.
Recomendaciones para gestionar el exceso de calor y sus consecuencias en los pies:
- Emplear zapatos y calcetines transpirables para que el pie no se mantenga húmedo todo el día
- No usar calzado de plástico o goma.
- Es facil resbalar si vas en chanclas muy sueltas.
- Si utilizas calcetines, cámbiatelos un par de veces al día para que el pie no esté siempre mojado dentro de un zapato.
- Higiene: parece una obviedad, pero hay que lavarse los pies diariamente y secárselos con precisión, sobre todo entre los dedos. En esa zona, los hongos adoran aparecer, debido al microclima que allí se genera.
- Variar de calzado: no lo tengas todo el día ni todos los días puestos. Si llegas a casa, quítatelos rápido y deja a los pies respirar.
- Hay productos específicos para paliar esta situación. Si te sudan los pies muy a menudo y todos los días, hay productos especiales para ello. Estos ayudan con el exceso de sudoración.
- Si eres de los que emplean plantillas a diario, háztelas de las que son perforadas. De esta forma, el pie podrá transpirar mejor y no habrá condensación en el zapato.
Si eres de las personas a las que les sudan los pies, debes llevar muy buena higiene. Cuidadar bien el secado a diario. Además, sería conveniente examinarte en una clínica como la nuestra, Podología Elena García en Granada, para descartar otras afecciones posibles y buscar un tratamiento paliativo para tu hiperhidrosis.
Inflamación por el calor
Los vasos sanguíneos se dilatan cuando las temperaturas aumentan, y además se reduce la elasticidad de las paredes. Esto ralentiza el bombardeo de sangre del corazón a las extremidades, lo cual produce inflamación.
Para tratar la inflamación es bueno colocar las piernas en alto durante un buen rato, refrescar los pies con agua fría y masajearlos un poco. Con toda esa ayuda, la inflamación y las molestias deberían disminuir.
Afecciones en la piel
El calor puede producir enfermedades cutáneas en los pies si no los protegemos. El sol es dañino, y los pies son los grandes olvidados cuando de repartir protección solar se trata. Al igual que los dedos, el empeine del pie suele quemarse fácilmente, dado que esta zona es fina, pues suele estar todo el año cubierta y poco expuesta.
Recuerda poner crema en todo el pie, planta incluida: será la única forma de evitar que se queme. Hazlo no solo cuando vayas a la playa, sino también si vas a salir a pasear con sandalias, pues ese sol también puede dañarlo.
Mal calzado
Ya hemos hablado muchas veces de que el calzado es muy importante para que el pie se mantenga íntegro. Cuando este no es de calidad o no es adecuado para la temporada, acaba produciendo daños en la piel que se agravan con el exceso de sudoración.
Empiezan a aparecer ampollas y rozaduras que en verano, debido a la humedad, son más difíciles de tratar. Como siempre decimos, usa un calzado adecuado que te sujete el tobillo y cuyo material de fabricación sea de calidad para evitar roces y sudoración de más.
Sequedad en los pies
El calzado abierto, el calor y caminar descalzos hace que la piel se seque y se agriete, lo cual produce una situación molesta. Utiliza cremas indicadas para pies, y notarás la diferencia.