¿Cuál es la causa del desprendimiento de una uña?
Las uñas de los pies son más delicadas de lo que pudieran parecer a simple vista. En ocasiones, las pobres padecen las consecuencias de la poca atención que los pies reciben. Un ejemplo de esa falta de atención es el desprendimiento de una uña del lecho ungueal, algo que puede ser muy doloroso y desagradable, y que reduce la calidad de vida de las personas.
Las razones por las cuales una uña de los pies puede separarse o desprenderse de la zona carnal pueden ser muchas. Aunque ciertas personas no le dan la importancia que tiene, desde Podología Elena buscamos concienciar a nuestros clientes acerca de cómo prevenir y tratar esta situación si llegara a sucederles. Esto puede pasarle a todo el mundo, es algo que les sucede tanto a mayores como a niños, pero que sobre todo se da en personas deportistas o dedicadas al baile profesional.
Es aconsejable acudir a un profesional cuando se comience a observar una coloración o descamación en las uñas. Esto quiere decir que algo raro está sucediendo en ella y que requiere intervención y atención médica para poder solventar el problema sin crear un desperfecto mayor.
¿Cuál es la causa del desprendimiento de una uña?
Desgarrarse una uña suele ser muy doloroso, sobre todo cuando se produce de forma abrupta. Los motivos pueden ser varios, y a continuación se analizarán:
Debido a lesiones
La separación de la uña causada por una lesión es muy frecuente en personas que suelen tener las uñas un poco más largas de lo recomendado, dado que pueden engancharse o levantarse al golpearse.
También es habitual que, debido a golpes fuertes o repetitivos en un dedo del pie, la uña tenga tendencia a ir separándose de la carne y se desprenda. Esto les ocurre mucho a los atletas profesionales, sobre todo a aquellos que no usan un calzado amplio. También es muy común entre los profesionales de la danza clásica debido a los ejercicios que realizan, al peso que depositan sobre los dedos de los pies y a los zapatos que llevan durante la práctica.
Infección por hongos
Las infecciones por hongos invaden la uña de un dedo (mano o pie) y la piel de debajo. Cuando las uñas se ven afectadas (la del dedo gordo del pie es la más común), se empiezan a rajar, cogen un tono amarillento, se decoloran, cambian de textura y de grosor. Esto provoca que se separen de la carne poco a poco.
En este caso, al contrario del anterior, se necesita recibir tratamiento, pues la uña no se curará sola, ni se caerá y nacerá una nueva. Lo más probable es que la infección se perpetúe y que la uña siga naciendo y despegándose continuamente hasta atajar el problema.
Otras afecciones
- Otro tipo de afección que suele provocar problemas de desgarro de la uña con respecto a los pies es la psoriasis. Las personas que padecen esta enfermedad suelen sufrir este problema de manera habitual.
- El uso de algunos productos químicos, como el quitaesmalte, la acetona e incluso ciertos jabones, puede provocar reacciones adversas en la piel y producir un desgarre de las uñas.
- Algunos medicamentos, como los relacionados con la quimioterapia o los antipalúdicos, pueden provocar que las uñas se enfermen y se vuelvan débiles hasta caerse.
- Otras enfermedades graves.
Una vez que la uña ha comenzado a separarse del lecho ungueal, no volverá a adherirse a la carne de nuevo. Una uña nueva deberá nacer y crecer en su lugar, y para que eso ocurra el entorno debe estar saludable, libre de heridas, hongos u otras infecciones. Una uña completa del dedo de una mano tarda cerca de 6 meses en volver a crecer; en cambio, una del dedo del pie puede tardar hasta 12 meses.
¿Cómo tratar este problema?
Existen diversos tratamientos que variarán en función de la causa. En algunas ocasiones, pueden tratarse en casa; en otras, habrá que acudir con regularidad al podólogo. Si el desgarro de la uña se debe a la ingesta de medicamentos, solo se podrán realizar terapias paliativas, pues este problema no desaparecería hasta que finalizara el periodo de medicación.